La radiografía de la obra de cualquier gran autor no suele mostrar más de una o dos temáticas predominantes si no únicas y, en lo fundamental, poca variedad de lenguaje, entendido este término en su más hondo sentido. Por eso, el lector pasará, al discurrir por esta obra, de un poema breve a uno más extenso, del verso corto al amplio, del regusto clasicista a experiencias más actuales, de la luz a la sombra, etc., sin notarlo, pues no sale de una misma y única atmósfera literaria, de un mismo y único mundo sentimental.Componen la presente colección 62 poemas, tan diversos en su contenido y forma, como coincidentes en un único latir, en un solo tenor poético. En ellos, como manifestaciones de una actitud personal, integra Milagros todas las voces y todos los modos venidos del acá y del allá más dispares. Los poemas son parcelas, facetas, tonalidades de una sola alma, que busca, así, el corazón, uno y diverso también, del lector.